Cuenta la leyenda que el Ave Fénix era capaz de renacer de sus propias cenizas. Cuando le llegaba la hora de morir, hacía un nido de especias y hierbas aromáticas, ponía un único huevo, que empollaba durante tres días, y al tercer día ardía. Se quemaba por completo y, al reducirse a cenizas, resurgía el mismo ave. Un nuevo comienzo que duraría 500 años. El Ave Fénix se ha convertido en un arquetipo universal, un símbolo de resiliencia, de purificación, de inmortalidad y de renacimiento físico y espiritual. Su simbolismo metafísico habla de la conciliación de los opuestos, de la constante transformación en medio de lo Inmutable. Como en una alquimia vital, se somete al fuego sabiendo que la transformación supondrá a un tiempo desaparición y permanencia, muerte y resurrección.

Los Aros Fénix O.I. son asimétricos. Están conformados por una "O" pequeña y una "I" larga. Están disponibles en plata o bronce.

Podés encontrar los otros diseños de Aros Fénix, también asimétricos. Todos están conformados por una combinación de líneas rectas y plegadas, realizadas con un hilo cuadrado martillado a mano, su textura tiene las huellas que deja cada golpe. 

• X.I. (Una X combinada de plata y bronce y una I larga de plata)
• P.I. U (Una P larga y una I corta). El par en plata o bronce

Para combinarlos, descubrí la Colección Fénix completa!!

Cada pieza es realizada a mano y puede presentar algunas variaciones con respecto a la imagen. 

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